Pablo Pimentel, presidente de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos – La Matanza, denunció la continuidad de una causa contra militantes del organismo por “extorsión” y señaló “la actitud inmoral y antiética de algunos abogados a quienes no les importa nada para mejorar la situación de sus defendidos”, en referencia a letrados que representan a los efectivos presos por la muerte de Gabriel Blanco en una comisaría del barrio San Carlos, Isidro Casanova, en 2007. Lo dijo hoy en el marco de una conferencia de prensa que convocó la Asamblea en su espacio de San Justo, a la que asistieron organizaciones sociales y sindicales del distrito.
También participaron Teófilo Blanco y Carmen, padres de Gabriel; Nora Cortiñas, Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora; el obispo metodista Aldo Etchegoyen, miembro de la mesa directiva de la Apdh Nacional; Elsa Gómez, de laAsociación Madres del dolor y el doctor Alejandro Bois, integrante de la Apdh-La Matanza.
El doctor Alejandro Bois aseguró que la causa contra la organización, en curso en el Departamento Judicial de La Matanza “es para coartar el accionar de los organismos de derechos humanos, no sólo en el caso de Gabriel Blanco sino en cualquier otro hecho de violencia institucional. Buscan que se piense dos veces antes de denunciar algo de un centro de detención”.
Nora Cortiñas expresó que esta acción contra la entidad es “un ataque a los organismos para denigrarlos” y destacó “el trabajo transparente y solidario” de los militantes de la Asamblea.
Elsa Gómez dijo que “somos madres de víctimas en democracia que salimos a denunciar el mal proceder de las instituciones”. “Los luchadores por los derechos humanos son maltratados y difamados por reclamar justicia”, agregó.
Aldo Etchegoyen dijo que casos como el de Blanco “han sucedido y suceden con otros jóvenes de la provincia de Buenos Aires. El torturador se cuida para no dejar rastros y quedar escondido; tiene la complicidad del sistema que lo protege”. Destacó que en esta ocasión “la verdad salió a la luz por el trabajo de la familia y la Apdh-La Matanza”, pero que “el noventa por ciento de los casos quedan en la impunidad absoluta”. “Hay que limpiar la democracia de mucha basura, la basura de la impunidad que tortura y roba”, afirmó.
Teófilo Blanco contó las circunstancias de la detención de su hijo Gabriel cuando la policía “lo pateó y golpeó” y recordó que le dijo que “si no robaba para ellos iba a desaparecer”. “No me querían entregar el cuerpo para que no viera lo que le hicieron, por eso le pegaron la mortaja al cuerpo”, rememoró.
La Comisión Provincia por la Memoria envió una adhesión con las firmas de Adolfo Pérez Esquivel y Hugo Cañón en la que afirman que la denuncia “no escapa a la herramienta común empleada por los represores de la dictadura como elemento de defensa personal a los efectos de evadir su responsabilidad. Entendemos que estas prácticas forman parte de un dispositivo tendiente a perseguir, desalentar e intimidar a las personas que luchan por la efectiva vigencia de los derechos humanos.”
La Apdh-La Matanza recibió el acompañamiento de Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora; Asamblea Permanente por los Derechos Humanos-Nacional; Hijos-Zona Oeste; Hijos-La Matanza;; Comunidad Educativa Rural; secretaría de Derechos Humanos de CTA-La Matanza; Comisión Memoria de ex alumnos del Colegio Normal de San Justo; Familiares y Amigos de Luciano Arruga; secretaría de Derechos Humanos de Suteba-La Matanza; Vecinos Autoconvocados contra la CEAMSE-González Catán y Nuevo Encuentro-La Matanza, entre otros.
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