Así como años atrás el movimiento de derechos
humanos argentino abrió causas contra los genocidas nacionales ante la justicia
de otros países porque en el nuestro gozaban de impunidad, el 14 de abril de
2010 se inició aquí la
Querella contra los crímenes del franquismo.
Esta acción se basa en el criterio de
“jurisdicción universal”, es decir que los delitos de genocidio cometidos en un
país, además de imprescriptibles, pueden ser juzgados desde cualquier otro país
precisamente porque significan un daño a la humanidad en su conjunto. La causa
abierta por la Querella
está a cargo de la jueza María Romilda Servini de Cubría.
Desde hace unos días se encuentra en nuestro país
una delegación de compañeras y compañeros españoles y vascos integrantes de la Coordinadora Estatal
de Apoyo a la Querella
argentina contra los crímenes del franquismo (CeAQUA), que agrupa a más de 80
organizaciones de todo el Estado español.
Con el patrocinio de un equipo de abogados
encabezado por Carlos Slepoy y el apoyo de organizaciones de derechos humanos
argentinas, promueven ante la justicia de nuestro país dicha querella, que es
la única en el mundo abierta contra los crímenes de lesa humanidad cometidos
por la dictadura franquista.
Nace la Plataforma de apoyo a la Querella
El sábado 3 de septiembre por la tarde, en la
sede de la
Federación Argentina de Sociedades Gallegas, se realizó una
importante y emotiva reunión donde se constituyó formalmente la Plataforma Argentina
de apoyo a la Querella.
Allí estuvieron nuestras compañeras Nora
Cortiñas y Mirta Baravalle, dirigentes de la CTA que encabeza Pablo
Micheli, la Asociación
de Ex Detenidos Desaparecidos, la Liga Argentina por los Derechos del Hombre y
otros organismos de derechos humanos, así como representantes de organizaciones
de un amplio arco político, entre ellas el MST-Nueva Izquierda y el Centro de
Abogados por los Derechos Humanos (CADHU).
Asimismo, en la Cámara de Diputados de la Nación, 11 diputados de
distintos bloques políticos pertenecientes a la Comisión de Derechos
Humanos también se pronunciaron en solidaridad con la Querella.